La emergencia sanitaria en la que se encuentra actualmente el país y el resto del mundo, ha obligado a las empresas y personas a replantear su manera de operar en la cotidianeidad, buscando soluciones en la tecnología para mantener a las personas con una rutina laboral, de aprendizaje o de ocio y un cierto equilibrio en la economía del país.
A un 72% llegó la implementación de nuevas modalidades como “Home Office” o “Trabajo remoto” dentro del sector empresarial, de acuerdo a una encuesta realizada por la consultora Randstad. En efecto, junto al aislamiento debido a la pandemia del coronavirus, herramientas digitales como el teletrabajo, teleducación o comercio online, han permitido a las personas y las empresas seguir operando de manera constante, aunque en un espacio completamente distinto al habitual: los hogares.
Este escenario presenta, sin duda, un gran desafío para las empresas, quienes han tenido que implementar cambios en su modelo de negocio y manera de operar, cambiando el entorno físico por uno virtual. Establecer reuniones de equipo vía online, generar espacios de concentración sin interrupciones en casa y aplicar pausas del día laboral, son para Jonathan Namuncura, analista de Soluciones Digitales de IDC Chile, algunos de los hábitos y rutinas que tanto empresas como trabajadores deben adoptar usando la modalidad remota, permitiendo así “una dinámica laboral acorde a las responsabilidades y actividades que manejamos diariamente”, asegura.Jonathan NamuncuraEste escenario presenta, sin duda, un gran desafío para las empresas, quienes han tenido que implementar cambios en su modelo de negocio y manera de operar, cambiando el entorno físico por uno virtual. Establecer reuniones de equipo vía online, generar espacios de concentración sin interrupciones en casa y aplicar pausas del día laboral, son para Jonathan Namuncura, analista de Soluciones Digitales de IDC Chile, algunos de los hábitos y rutinas que tanto empresas como trabajadores deben adoptar usando la modalidad remota, permitiendo así “una dinámica laboral acorde a las responsabilidades y actividades que manejamos diariamente”, asegura.
En este contexto, Patricio Ibáñez, gerente de Outsourcing de Aplicaciones (AO) de Adexus, explica que la crisis social que se manifestó desde octubre del año pasado puso a prueba a gran parte de las compañías del país, lo que les permitió hacer un mejor frente al brote de Covid-19, ya que las empresas habían logrado poner a prueba distintos mecanismos para mantener la productividad.
“En nuestro caso y en el de varios de nuestros clientes, logramos cumplir con el desafío de asegurar la productividad de los equipos sin bajar la calidad de los servicios. Esto se logró mediante la habilitación de herramientas de colaboración para los colaboradores, aplicaciones de comunicación online con los clientes y el refuerzo de metodologías ágiles de trabajo para asegurar el cumplimiento de la planificación y control de cada proyecto”, declara Ibáñez.
En efecto, y de forma a asegurar una mayor eficiencia dentro del espacio digital de trabajo conjunto, “contar con buenas herramientas de colaboración y productividad, esto es, softwares y plataformas que permitan a los trabajadores seguir con su labor sin interrupciones, se han transformado en una necesidad”, agrega el experto de IDC. Plataformas como correo electrónico, ofimática, repositorios de documentos y portales de colaboración, son todas soportes que se requieren para la operación diaria de un negocio y cuyo funcionamiento depende de una conexión a internet, permitiendo trabajar colaborativa y sincrónicamente documentos, reuniones y cualquier otro tipo de iniciativas.
En este sentido, Marco Terán, director de Desarrollo Tecnológico de Fundación País Digital, aclara que “hoy existen múltiples herramientas digitales que se puedan usar fuera de la oficina y aplicaciones gratuitas o a bajos costos que son fáciles de usar para el trabajo cotidiano”.
Desde el punto de vista comercial, el uso de Google Maps, soluciones marketplace y plataformas de e-commerce como Shopify, Jumpseller o BSale, “han sido, en estos últimos tiempos, los soportes más empleados por las PYMES”, revela Terán, agregando que bajo un punto de vista operativo, “grandes empresas, organizaciones y otras compañías se han sumado a la modalidad remota, implementando una estrategia de colaboración mediante plataformas o aplicaciones que permitan la conexión entre los distintos colaboradores de una empresa”, declara.
Protección de datos
Junto a la modalidad de teletrabajo, donde los colaboradores de las compañías acceden constantemente a archivos e información de la empresa desde sus casas, para dar continuidad a su trabajo, la seguridad de los datos, es sin duda un aspecto importante a considerar.
En este contexto, Patricio Ibáñez, de Adexus, explica que “las soluciones de seguridad deben estar siempre blindadas para ataques tanto de dentro de las organizaciones como desde el exterior”. Además recalca que la separación de las capas de accesos a los servidores de aplicaciones y a las bases de datos “es parte de una política que debe estar presente en todo momento y bajo cualquier forma de conexión a las infraestructuras críticas del negocio”.
En eso coincide el analista de IDC Chile, quien agrega que es importante que, además de proporcionar las aplicaciones propias del negocio, las compañías consideren que los accesos desde las redes personales de los trabajadores se movilicen en entornos seguros, a través del uso de VPN y Herramientas de Control de Acceso.