Los centros de datos se han convertido en infraestructuras clave para el desarrollo de los países y la digitalización de las economías e instituciones públicas y privadas en todo ámbito. Estos edificios permiten almacenar, distribuir y analizar miles de millones de datos por segundo de manera eficiente y segura.
En los últimos años, Chile ha tenido un crecimiento sostenido de las capacidades de almacenamiento y procesamiento de la información. De hecho, un reporte de la consultora IDC estima que los metros totales de data center en Chile habrán aumentado más de 70% respecto a 2018, pasando a 50.763 metros cuadrados para 2023, posicionando al país como un hub tecnológico a nivel regional.
Pero los data centers hoy tienen nuevos desafíos como la sostenibilidad a abordar en su funcionamiento y también se ven afectados por los fenómenos meteorológicos extremos y las consecuencias del cambio climático. En Estados Unidos, según datos del Departamento de Energía, estos recintos consumen casi el 2% de la producción total de electricidad de ese país, por lo que han impulsado un financiamiento de cerca de 42 millones de dólares para superar las barreras tecnológicas con el fin de desarrollar soluciones energéticamente eficientes y de alto rendimiento.
¿Qué experiencia hay en Chile sobre eficiencia energética y funcionamiento sostenible de estos centros de datos? ClaroVTR acaba de anunciar la ampliación de su Data Center Liray en 3.000 m2 y se consolida como uno de los más grandes del país, totalizando 5.000 m2, con una inversión total cercana a los US$320 millones, que además lo conecta con otros 21 data centers de clase mundial en Latinoamérica.
El centro de datos cumple con estándares de clase mundial, además de contar con certificación Tier IV y “LEED BD+C Data Center”, que permite una performance vinculada a la eficiencia y reducción de huella de carbono. Además, usa energías renovables como la eólica y solar garantizando un mejor uso de los recursos, desde la optimización eléctrica con controles y tecnología de bajo consumo hasta manejo de la temperatura con el uso de equipos de enfriamiento eficientes apoyándose con las condiciones naturales de la zona y sin uso de químicos contaminantes para su operación, entre otros atributos.
Esta carrera mundial de largo aliento por la sostenibilidad requiere de un compromiso permanente en la industria, aplicando innovación y elevando las exigencias sustentables de estos centros tecnológicos con energía limpia y sistemas eficientes que contribuyan a la disminución de la huella de carbono, aportando al cumplimiento de las metas del país de reducción de emisiones.
Francisco Guzmán
Director de Claro empresas